miércoles, 2 de abril de 2014

“EL CORDOBÉS“ CONCLUYE SU PREPARACIÓN DE CARA AL FESTIVAL DEL CÁNCER




Ladislao Rodríguez Galán
 Diez tentaderos en diversas ganaderías, andaluzas y extremeñas, han dejado bien claro que Manuel Benítez se encuentra en un estado más que  óptimo de forma, para afrontar el compromiso adquirido con la Asociación Local de la lucha contra el Cáncer, para intervenir en el festival del próximo  día cinco en Córdoba.
En el último tentadero- celebrado en la finca Los Arenales (Hornachuelos) donde pastan las reses de Doblas Alcalá- Benítez volvió a compartir tareas camperas con su hijo Julio, con el que hará el paseíllo  el próximo sábado.

EN PLENA FORMA

Apenas se ofreció para encabezar el cartel del histórico festival, Manuel comenzó con su intensa preparación campera, pues aunque  nunca abandonó su forma física, andar en la cara del toro es bien distinto. Se necesita soltura y seguridad, y eso se adquiere toreando. Y a eso se ha dedicado en cuerpo y alma los dos últimos meses. En uno de sus primeros tentaderos, celebrado en Villalobillos, le vimos con mucho desparpajo toreando muy requetebién al natural, y lo que es más importante con  sitio, como si nunca hubiera dejado de torear. Y es que su cintura y su muñeca de privilegio, que tanta profundidad imprimió a su toreo en sus años gloriosos, siguen siendo sus más aventajadas armas.
Pues bien, como decimos, ha cerrado el calendario de entrenamientos ante un lote de seis eralas, que más que un examen fue una confirmación de sus idóneas facultades  para realizar el toreo. El ganado salió muy bueno y Benítez lo aprovechó al máximo (véase el natural de la foto que ilustra esta página) tanto con el capote como con la muleta. Una continua lección de buen toreo, parando, templando y mandando entre los olés de un grupo reducido de aficionados amigos, incluyendo al ganadero Antonio Doblas. Hasta tres becerras toreó en un maratón que significó una prueba de capacidad y aguante, superada con creces. Y es que Benítez está con fuerza e ilusión ante el difícil compromiso del sábado, pues sabe que será el foco de atención de los miles de aficionado que acudirán al coso de Ciudad Jardín, dispuestos a verlo triunfar como en sus mejores tiempos.

Pero si el padre estuvo cumbre, al más puro estilo Benítez, Julio no se quedó atrás. Se encuentra en un excelente momento de forma y disfruta y hace disfrutar toreando. El sábado tiene una ilusionante papeleta pues ha de competir con un mito del toreo, que además, es su padre. Histórica tarde de toros la del día 5 en Córdoba. No se la pierdan.-