NOVILLADA EN LUCENA
BUENOS
NOVILLOS Y UN PRESIDENTE INSENSIBLE
Lucena (8-9-2013)
Ganado: seis
novillos de Fuente Ymbro de aceptable presentación, bravos y nobles. El primero
muy bueno y el quinto, premiado con la vuelta al ruedo, extraordinario.
Andrés Jiménez “Gallo Chico”: estocada
tendida ( oreja) y estocada ( oreja).
Antonio Puerta:
estocada ( dos orejas) y estocada ( dos orejas, tras dos avisos).
Miguel Ángel Serrano: pinchazo y estocada caída (oreja) y dos pinchazos y estocada( vuelta
al ruedo).
Plaza: Los
Donceles. Alrededor de media entrada en tarde de agradable temperatura.
Incidencias:
El festejo comenzó con 40 minutos de retraso por no haber llegado la ambulancia
y por carecer de banderillas para el festejo. El primer novillo se desnucó al
estrellarse de salida contra un burladero. El presidente desoyó el clamor de la
plaza para indultar al quinto. Puerta y Gallo Chico, acompañados del mayoral,
salieron a hombros.
Siempre
se ha dicho que el público es un bendito y cada vez que hay oportunidad, por lo
menos en el mundo del toro, se confirma este dicho popular. En la plaza de
toros de Lucena el respetable aguantó lo indecible antes de que las cuadrillas
cruzaran el albero. Más de cuarenta minutos fueron necesarios para organizar
una serie de desafueros que tenían que estar resueltos a la hora indicada de
comienzo. Por un lado la falta de ambulancia
y por otro el carecer de banderillas. Menos mal que Rafael Casado, mozo de caballos, siempre lleva
una caja de emergencia en el coche. Pero las banderillas no eran las
reglamentarias. Otro problema añadido. Por fin imperó el sentido común y se inició el despeje.
Pero
aún habría otro desagradable acontecimiento antes de que la tarde tomara el
rumbo definitivo. El primer novillo, de salida, fue a estrellarse de frente
contra el burladero de matadores y se desnucó muriendo instantáneamente. Menos
mal que el “bajío” de la tarde quedó ahí.
Analizando la novillada hay que destacar la
labor de Gallo Chico, quien a pesar de no estar suficientemente toreado,
demostró un buen estilo, con cabeza y sitio. De haber tenido un poco más de
experiencia, su labor ante el primer novillo de la tarde hubiera alcanzado más
altos vuelos. El animal, noble y con mucha clase en la embestida, pedía a voces
un torero mas cuajado. No estuvo mal Gallo Chico, que enjaretó series muy
estimables con ambas manos, pero nos pareció poco con el material que tenía
enfrente. En el cuarto su voluntad y entrega palió la exagerada falta de
fuerzas de su oponente. También dibujó muletazos de buena factura.
Antonio
Murciano no respondió a las expectativas. Su contrastada experiencia quedó en entredicho
ante el lote más completo de la tarde. En su primero la faena fue mecánica,
falta de sentimiento y alma y en el fabuloso quinto, le faltó la chispa
necesaria, para , con rotundidad, rubricar una buena faena, sin más, a un
novillo extraordinario que no se cansaba de embestir. Torear no es dar pases..
El tendido ante tanta nobleza y bravura estalló en una petición de indulto
unánime. El bravo animal, que tomó solo una vara, pero muy intensa, se había merecido
la vida. El único que no lo entendió fue el presidente, una persona insensible.
¿Qué mas tiene que hacer un toro para ganarse el indulto?. Hizo caso omiso al
delirio del tendido y ordenó al diestro que lo estoqueara, cosa que éste hizo
tras recibir dos avisos. Otro buen toro que se pierde ante la incomprensible
actitud de uno que debe ser buen aficionado para ocupar el palco. ¡Hay Dios
mío¡.
Miguel
Ángel Serrano, por su parte, hizo lo que pudo ante dos novillos que le
permitieron todo y le exigieron más. El chaval no torea desde que debutó con
caballos el año pasado y eso quedó reflejado en su labor. Sin embargo cumplió
dignamente.
La
verdad del caso es que salimos de la plaza con el regusto amargo de haber visto
una buena novillada de Fuente Ymbro, por encima de los toreros, y no haber
podido perdonar la vida a un ejemplar que se la había merecido. La vuelta al
ruedo ¿Para qué?. A burro muerto la cebada al rabo…- L.R.G.
